Encuentra tu fuerza inesperada cuando las decepciones te dejan destrozado.
¿Qué hacer cuando el tiempo de Dios parece ser cuestionable, su falta de intervención te lastima y sus promesas son inciertas?
La vida a menudo se presenta muy diferente a lo que habíamos esperado o soñado. Algunos acontecimientos nos toman con la guardia baja por solo un momento, pero otros nos sacuden por completo. Nos sentimos desilusionadas o decepcionadas y, en silencio, comenzamos a preguntarnos acerca de la veracidad de la bondad de Dios.