Un mercado laboral globalizado exige profesionales que sepan moverse con soltura en la principal lengua utilizada en los negocios: el inglés. Quizá se ha impuesto porque es un idioma de gramática simple, sin declinaciones y sin apenas conjugación verbal, lo cual es una gran ventaja a la hora de estudiarlo Cada capítulo presenta de manera esquemática la utilización de los verbos, ofrece organigramas y multitud de ejemplos para practicar.