En 1756, la escritora francesa Jeanne Marie Leprince de Beaumont publicaba esta versión, la más conocida, de un relato que reescribieron, a su manera, desde el italiano Straparola hasta Perrault o Madame de Villeneuve. Para evitar la amenaza de muerte que ha lanzado contra su padre, Bella, la hija más noble de un mercader arruinado, acepta entregarse a la Bestia, tosco y asilvestrado señor de un palacio, a quien conocerá poco a poco y cuyo corazón se irá ganando. Una historia que testimonia la belleza interior de las personas y lo desaconsejable que resulta fiarse de las apariencias. Francesca DellOrto nos ofrece una mágica interpretación de uno de los cuentos de hadas más inquietantes y, a la vez, más conmovedores.