Levittown “mon amour” entusiasma desde la oración primera. Pues la reciedumbre narrativa, alcanzada por un idioma sin adorno y unos personajes que se niegan a hacer las paces con el desamparo, hermana los cinco cuentos del rotundo libro. La reciedumbre narrativa hermana los cuentos. Pero, el arte de contar le provee unidad a la colección. Diestros, exactos, persuasivos los cuentos de Levittown “mon amour”, avanzan sin permitirse averías o desafinamientos. Porque Cezanne Cardona Morales sabe contar con la resolución, la firmeza y la intensidad propias del escritor excelente que es.