La vida es una colección de memorias, música y despistes. Un día eres joven y, en un pestañeo, llega la adultez a hacer de las suyas. Entre achaques y responsabilidades, de vez en cuando se nos puede olvidar apagar la estufa antes de salir o ponernos los zapatos para ir a trabajar. Lo que no se nos debe olvidar es separar esos ratitos para hacer aquellas cosas que nos traen felicidá. Si andas por la vida dibujando pajaritos y pensando en café mientras estás en el trabajo, este libro es para ti.